El artista interpretará sus grandes éxitos rodeado de un público de todas las edades

Tras su éxito en Zaragoza esta misma semana (en donde dicen los cronistas que se impusieron las baladas por encima de los bailes), Ricky Martin aterriza este domingo en el Bilbao Exhibiton Center con la intención de reunirse con su público y hacer olvidar los problemas durante dos horas escasas. El semblante siempre sonriente y sus caderas imparables serán el principal atractivo de una noche que promete ser muy especial para los seguidores del intérprete puertorriqueño. En sus conciertos, celebrados hasta la fecha, ha habido oportunidad de disfrutar de temas como Tu recuerdo, Vuelve, Adiós, Vente pa’ ca, Lola, Lola, María, La bomba, Por arriba, por abajo, Pégate, The Cup of Life o la incombustible La mordidita.

En una gira que le ha llevado a recorrer algunas de las más importantes ciudades de la península como Granada, Madrid, Sevilla, Zaragoza o Valencia entre otras, Ricky se ha alzado como un ídolo de masas al que poco parecen haberle afectado los años y que sigue saltando a escena como el chico joven que arrasó en el mercado musical hace ya algunos años. Ahora, y con mucha más experiencia a cuestas, el músico presenta un espectáculo en el que las baladas se hermanan con las canciones latinas de baile y los cambios de vestuario sirven como hilo conductor de un espectáculo frenético y lleno de ritmo.  El músico ha demostrado además en las últimas semanas (aprovechando sus inevitables tours promocionales por los diversos medios de comunicación), que es un artistas comprometido con temas como la inmigración o la pobreza e incluso a lo largo de sus conciertos dedica cierto espacio a cantar a aquellos menos afortunados.