Curiosidad 5

El Kurding Club fue creado en la década de los ochenta del siglo XIX y su local estaba ubicado en la plaza del Arenal.

Aunque su nombre real fue El Escritorio, se popularizó como Kurding, debido a las kurdas o borracheras que se agarraban sus socios, jóvenes burgueses bilbaínos.

 

Llegó a tener 43 socios y una vida de unos 14 años. Un cura llegó a decir desde el púlpito, que el Kurding Club era la ‘antesala del Infierno’.

Algunos miembros del club realizaron paneles decorativos para sociedad, de los que se conservan algunos pintados por Ignacio Zuloaga, Manuel Losada y Anselmo Guinea. Hoy en día esos paneles pueden contemplarse en la Sociedad Filarmónica de Bilbao.